Esta semana he estado muy atento a las noticias relacionadas con las energías renovables y en especial sobre la energía solar, la cual siempre me ha resultado una tecnología interesantísima y en la que sin duda descansará un gran porcentaje de la generación de energía a nivel mundial en un futuro que no se ve tan lejano.
Tras chequear varios textos e informes, el comunicado emitido por Bloomberg basado en los pronósticos que la Bloomberg New Energy Finance (BNEF) es el que me ha generado mayor satisfacción por lo completo e interesante del mismo, pero sobre todo por su dato inicial: “los costos de la energía solar caerán un 66% para el 2040 y la energía eólica onshore en un 47%, con las energías renovables sobreponiéndose a la mayoría de las centrales eléctricas existentes para el 2030”.
El informe basa sus datos en el último pronóstico de la importante firma de periodismo financiero realizado por el New Energy Outlook 2017 (NEO), que básicamente muestra cómo se va descarbonizando el sistema de generación mundial de energía.
Les compartiré mis comentarios sobre algunas de las conclusiones que este informe emite:
1. CRECIMIENTO:
Se prevé que para el 2040 la energía solar crecerá 14 veces su capacidad representando. Se espera entonces que para ese año la energía solar y eólica representen el 48% de la capacidad instalada y el 34% de la generación de electricidad, que hoy representa el 12% y el 5% respectivamente.2. ENERGÍA BARATA:
Los costos de la energía solar se reducirán en un 66% para 2040. En países tan grandes como Alemania, Australia, Estados Unidos y otros más pequeños como Italia o España, ya la energía fotovoltaica es tan barata como el carbón. Para el 2021 será mucho más barata que el carbón en otras grandes naciones como China, India, México, el Reino Unido y Brasil.
3. MONSTRUOS ASIÁTICOS:
China e India se presentan con una oportunidad de 4 billones de dólares para el sector energético, y es que la región Asia-Pacífico invierte casi lo mismo que el resto del mundo en generación de energía. Del valor total, se proyecta que un tercio se destinará a la energía eólica y otro tercio para la energía solar; 18% para la energía nuclear y un 10% para la energía basada en carbón o gasolina.